Nothing Lasts Forever -Memi- Cap 10

Ese domingo me llevo en el auto al estadio, donde nos encontramos con Demi, una vez que papa se fue tomamos el tren, yo no sabia que tema ponerle a Demi, nunca desde que tengo memoria he tenido un tiempo a solas con ella, la conversación fue fluyendo, hablamos del colegio, de la casa, de la abuela y de su campo.

Una vez adentro, me impresionaba la cantidad de luces que había en el escenario, cuando entro la banda a dar su show, todas esa personas cantando junto a la banda animadamente, los papeles que tiraban en el aire y una que otra gritona.

En un momento cerré los ojos para poder sentirlo todo sólo con el cuerpo, sin la mirada que siempre influye en las sensaciones. Los gritos y el cemento vibrando bajo mis pies. No sé cuanto tiempo estuve así. Cuando los abrí los tenía llenos de lágrimas. Mire a Demi y le dije:

 —Gracias. Es fantástico.

Y ella me abrazo. Que bien se sentía, era la primera vez que lo hacia.

Cuando el concierto termino, caminábamos las dos despacio. Yo estaba feliz, la tarde había sido maravillosa, íbamos afónicas y sudorosas. Hablamos sobre el concierto y las dos reímos juntas al recordarlo todo.

Demi me acompaño hasta la puerta de mi casa y no quiso pasar, dijo que tenia que levantarse temprano. En ese momento me di cuenta de que yo no sabia nada de Demi, ¿Dónde trabajaba? ¿Cómo vivía? Mentalmente me lo agendé para la próxima vez. Quería que me contara de ella.

Cuando entre mi madre me preguntó si me había pasado algo, si estaba bien y si tenía hambre. No, si y no fueron mis respuestas respectivas. Mi padre no me preguntó nada. Esperó que me bañara y luego me invitó a "dialogar".

Lo que dijo mi padre ese domingo, que hasta ese momento para mí había sido mágico fue más o menos lo siguiente. Primero: No dejaba de sorprenderlo mi repentino interés por el rock, eso demostraba que él me había descuidado, cosa que no volvería a pasar. Pero bueno, él me había inculcado el amor por la música y no se opondría a mi pasión, desde ese momento iríamos juntos actuaciones de opera cada vez que yo quisiera, obviamente a donde va la gente adinerada, muy diferente a la que me llevo Demi, que es a donde van los vándalos.

Segundo: Mi relación con Demi. Dado que yo nunca había manifestado interés en relacionarme con mi hermana, mi padre sostuvo que era mejor continuar así. Como regalo de cumpleaños era bastante simpático "un CD de música moderna y un viaje en colectivo hasta el estadio para ver un concierto” pero que nuestra relación terminaba allí. Que no era "sano" para una niña menor andar por ahí con alguien mayor, por más que ésa fuera su hermana.

Tercero: Él entendía que yo estaba por ingresar a la pubertad, que mi cuerpo estaba empezando a cambiar, y tal vez tenía alguna duda o pregunta que hacer. Si era por eso, tenía que confiar en él, después de todo era mi padre, me había dado la vida, me había educado.

Y cuarto: En cuanto a Demi, me prohibía volver a verla fuera del ámbito familiar. Todo esto por supuesto "era por mi propio bien" y "más adelante se lo agradecería".

Mi padre como siempre, dio por terminada la conversación y se marcho. Yo me quedé sentada en su despacho llorando en silencio un largo rato. Cuando salí, todos se habían acostado. Eran miles las cosas que no podía entender, lo único que sentía era que había algo que no encajaba con el mundo.

 Y que ese algo era yo.

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Deje capitulo ya que mi hermano llega mañana y cuando el llega no me deja acercarme ni un minuoto a la compu (lo odio) asi que de pronto el vienes vuelva a subir