miércoles, 10 de abril de 2013

My Beautiful Love- Niley- Cap 33


Las semanas pasaron, y era una sorpresa para mí cuán rápido llego el receso de primavera, los chismes y las miradas se habían desvanecido y la visa había vuelto a la normalidad. Los sótanos de la Universidad Eastern no habían tenido una pelea en semanas. Adam mantuvo un bajo perfil después del arresto que había llevado a preguntas de que era lo que exactamente que paso esa noche, y Nick se volvía más irritable esperando la llamada que lo llevaría a su última pelea. La pelea que pagaba casi todas sus cuentas del verano y entrando el otoño. La nieve aun estaba espesa en el suelo, y el viernes antes de vacaciones una última bola de nieve estallo en el césped cristalino. Nick y yo caminamos a través del hielo que caía hacia la cafetería, y yo me sostuve fuerte en sus brazos, tratando de evitar ambos, las bolas de nieve y caer al suelo.
-Ellos no van a darte Pidge, ellos los saben- Nick dijo, ocultando su nariz roja y fría en mi mejilla.
-Su objetivo no es sinónimo del miedo a tu temperamento Nick- Él me sostuvo a su lado, frotando la manga de mi abrigo con su mano mientras me guiaba a través del caos. Llegamos a un final abrupto cuando un montón de chicas gritaban mientras eran atacadas sin piedad por el equipo de beisbol. Una vez el camino se despego Nick me guio a salvo a la puerta.
-¿Ves? Te dije que lo lograríamos- dijo con una sonrisa. Su diversión desapareció, cuando una bola de nieve golpeo la puerta, justo entre nuestros rostros, la mirada de Nick escaneo el césped, pero la cantidad de estudiantes lanzándolas en cualquier dirección desvaneció la necesidad de tomar represarías. Él abrió la puerta mirando a la nieve derritiéndose desde el metal pintado hacia el suelo -Entremos.
-Buena idea- asentí. Él me llevo de la mano hacia la fila del buffet, apilando diferentes platos al vapor de una bandeja, La cajera había abandonado su expresión de desconcierto hace semanas, acostumbrada a nuestra rutina.
-Miley- James me dio un asentimiento de cabeza y guiño su ojo a Nick -¿Tienes planes para la próxima semana?
-Nos quedaremos aquí, mis hermanos vendrán- Nick dijo distraído mientras organizaba nuestros almuerzos, dividiendo los pequeños platos de polietileno frente a nosotros en la mesa.
-Voy a matar a Davis Lapinski- Demi anuncio sacudiendo la nieve de su cabello mientras se acercaba.
-¡Golpe directo!- Joe se rio. Demi le lanzo una mirada de advertencia y su risa se volvió una risa nerviosa -quiero decir…que idiota- Nos burlamos de su lamentable expresión mientras él la observaba ir se de la línea del buffet para seguirla rápidamente.
-Él es tan llorón- dijo James con una expresión de disgusto.
-Demi está un poco tensa- Nick explico -ella conocerá a sus padres esta semana.
James asintió y sus cejas se alzaron -Entonces ellos van…
-Si- dije asintiendo con él -Es permanente.
-Whoa- James dijo, la sorpresa no dejo su rostro mientras servía su comida, y pude ver la confusión arremolinarse a su alrededor. Todos éramos jóvenes, y James no podía seguir la idea del compromiso al Joe.
-Cuando lo tengas James…lo entenderás- Nick dijo, sonriéndome. La sala estaba llena de emoción, de ambos: el espectáculo de afuera, y lo rápido que pasaban las horas antes del receso. A medida que los asientos se llenaban, el flujo constante de charla creció, el volumen aumento mientras todo el mundo comenzó habar sobre el ruido. Para el momento en que Joe y Demi volvieron con sus bandejas ya se habían reconciliado. Ella felizmente se sentó en el asiento vacío a mi lado. Platicando sobre el momento en que conocería a los padres. Ellos se irían esa tarde para lo de su padre, la excusa perfecta para uno de los infames colapsos de Demi. La vi coger el pan mientras ella se preocupaba en hacer las maletas y la cantidad de equipaje que debería llevar sin parecer pretenciosa, pero ella parecía llevarlo bien.
-Te lo digo, bebe. Ellos te amaran, te amaran. Como yo te amo, te amo- Joe dijo. Acomodando su cabello detrás de su oreja. Demi tomo un respiro y las comisuras de subieron de la forma en que siempre lo hacían cuando él la hacía sentir más tranquila. El teléfono de Nick vibro, provocando que se deslizara unos centímetros de la mesa. Él lo ignoro, contándole a James nuestro primer juego de póquer con sus hermanos, eche un vistazo a la pantalla, tocando el nombre de Nick cuando leí el nombre.
-¿Bebé?
Sin una disculpa, él se alejó de James y me dio toda su atención -¿Si Pigeon?
-Tal vez quieras contestar eso.
Él miro a su celular y suspiro -O no.
-Podría ser importante.
Frunció sus labios antes de colocar el auricular en su oído -¿Qué pasa Adam?- Sus ojos recorrieron el salón mientras hablaba, asintiendo ocasionalmente -Esta es mi última pelea Adam. Aun no estoy seguro. No iré sin ella y Joe saldrá de la ciudad. Lo sé…te escuche. Hmm…en realidad esa no es una mala idea- Mis cejas se juntan, viendo a sus ojos brillar con cualquier idea con la cualquier Adam lo haya iluminado. Cuando Nick cuelga el teléfono, lo veo expectante. -Es suficiente para pagar la renta por los próximos seis meses. Adam consiguió a John Savage, él trata de llegar a las profesionales
-Yo no lo he visto luchar, ¿tu lo has hecho?- Joe pregunto, acercándose.
Nick asintió -Solo una vez en Springfield. Él es bueno.
-No lo suficiente- digo y Nick se acercó a mí y beso mi frente suavemente con apreció -Puedo quedarme en casa Nick.
-No- dijo él negando con la cabeza.
-No quiero que te golpeen como la ultima vez porque estas preocupado por mi.
-No Pidge.
-Esperare por ti- Tratando de parecer más feliz con la idea de lo que me sentía.
-Le pediré a Frank que venga. Él es el único en el que confió para poder concentrarme en la pelea.
-Muchas gracias, idiota- murmuro Joe.
-Oye, tuviste tu oportunidad- dijo Nick medio bromeando. La boca de Joe fue hacia un lado con disgusto. Aun se sentía culpable por la noche Hellerton. Él se disculpo conmigo diariamente por semanas. Pero su culpa se volvió lo suficientemente manejable para que sufriera en silencio. Demi y yo tratamos de convencerlos de que no era su culpa. Pero Nick siempre lo haría responsable.
-Joe no fue tu culpa. Tu lo alejaste de mi ¿recuerdas?- dije rodeando a Demi para tocar su brazo. Me volví a Nick -¿Cuándo es la pelea?
-En algún momento la próxima semana- él se encogió de hombros -te quiero allá, te necesito allá.
Sonreí. Descansando mi barbilla en sus hombros -Entonces, estaré allí.
Nick me acompaño a clases, su agarre tensándose algunas veces cuando me deslizaba en el hielo -Deberías ser más cuidadosa- él bromeo.
-Lo hago a propósito, eres tan tonto.
-Si quieres mis brazos alrededor tuyo, solo necesitas preguntar- dijo él acercándome a su pecho. Éramos ajenos a los alumnos y las bolas de nieve que volaban mientras el presionaba sus labios contra los míos. Mis pies dejaron el suelo y él continuo besándome. Cargándome fácilmente a través del campus. Cuando él finalmente me dejo en sobre mis pies frente al salón de clases, él negó con la cabeza.
-Cuando hagamos nuestros horarios el próximo semestre. Sería más conveniente si tuviéramos más clases juntos.
-Trabajare en eso- dije, dándole un último beso, haciendo mi camino a mi silla. Mire hacia arriba, y Nick me dio una última sonrisa antes de hacer su camino para su siguiente clase en el otro edificio. Los estudiantes a mi lado estaban acostumbrados a nuestras descaradas formas de afecto justo como sus clases lo estaban a que el llegara unos minutos tarde. Estaba sorprendido de que el tiempo pasara tan rápido. Termine mi última prueba, y me dirigí al pasillo Morgan. Selena estaba sentada en su usual lugar en la cama, leyendo mientras revisaba mis cajones por los objetos necesarios.
-¿Vas a salir de la ciudad?- pregunto Selena.
-No, solo necesito unas cuantas cosas, voy hacia el edificio de ciencias a recoger a Nick. Y luego pasare la semana en su apartamento.
-Lo supuse- dijo ella. Sin quitarle la vista a las hojas de su libro.
-Ten un buen descanso Sel.
-Mmmhmmm.
El campus estaba prácticamente vacío, con solo unos cuantos estudiantes. Cuando voltee en la esquina, vi a Nick parado afuera terminando su cigarrillo, llevaba un gorro de lana sobre su cabeza rapada, y una de sus manos se metió en su bolcillo en su chaqueta desgastada de cuero marrón. El humo salía de su nariz, mientras miraba hacia el suelo sumido en un profundo pensamiento. No fue sino hasta que estuve a unos metros de él que note cuan distraído estaba.
-¿En qué piensas bebé?- Pregunte. Él no miro hacia arriba -¿Nick?
Sus pestañas revolotearon al registrar mi voz y la expresión de preocupación fue remplazada por una sonrisa falsa -Hola Pigeon.
-¿Todo está bien?
-Lo está ahora- dijo él. Jalándome contra él.
-De acuerdo. ¿Qué está pasando?- Dije levantando una ceja y frunciendo el seño, mostrando mi escepticismo.
-Solo tengo bastante en mi mente- él suspiro. Cuando espere expectante él continuo -Esta semana, a pelea, tú estando allí…
-Te dije que me quedaría en casa.
-Te necesito allí Pidge- dijo él. Tirando su cigarrillo en la tierra. Él lo vio desaparecer en una gran huella de nieve, luego tomo mi mano, llevándome hacia el estacionamiento.
-¿Has hablado con Frankie? Pregunte.
El negó con la cabeza -Estoy esperando que él me llame de vuelta.
Demi bajo la ventana y saco su cabeza del Charger de Joe -¡Apúrate está haciendo demasiado frio!- Nick sonrió y acelero el ritmo, abriéndome la puerta para que yo entrase. Joe y Demi repitieron la misma conversación que han tenido desde que ella se entero que conocería a sus padres mientras yo miraba a Nick observar la ventana. Justo cuando estábamos estacionándonos el teléfono de Nick sonó.
-¿Qué diablos Frank?- él respondió -te llame hace horas, no es como si fueras productivo en el trabajo o algo así. Como sea. Escucha, necesito un favor, tengo una pelea la próxima semana. Necesito que vayas, no sé cuando es, pero cuando te llame necesito que este a allí en menos de una hora ¿Puedes hacer eso por mí? ¿Puedes hacer eso, idiota? Porque necesito que mantengas un ojo en Pigeon. Un idiota puso sus manos en ella la ultima vez…si- su voz bajo a un tono amenazante -Si me encargue de eso. ¿Entonces si llamo…? Gracias Frankie- Nick cerró su teléfono y se recostó contra el respaldo del asiento.
-¿Aliviado?- Joe pregunto, mirando a Nick por el espejo del retrovisor
-Si no estaba seguro de que haría sin él allí.
-Te dije...- comencé
-Pidge, cuantas veces tengo que decírtelo- él frunció el seño.
Negué con la cabeza ante su tono impaciente -No entiendo. No me necesitabas antes.
Sus dedos rozaron mi mejilla suavemente -No te conocía antes, cuando no estás allí no puedo concentrarme. Me pregunto donde estas, que estás haciendo…si estas allí y puedo verte, puedo concentrarme. Sé que suena loco pero se como es.
-Y loco es exactamente como me gusta- sonrió, acercándome a besar sus labios.
Obviamente- Demi mascullo bajo su aliento.
En las sombras de Keaton Hall, Nick me sostuvo fuertemente a su lado, mi aliento se mesclaba con el de él en el aire frio. Y podía escuchar las conversaciones esas filtrándose por la puerta que estaba a unos pocos metros, ignorantes a nuestra presencia. Keaton era el edificio más viejo de Eastern y aunque aquí se ha celebrado antes El Circulo, yo estaba inquieta sobre el lugar. Adam esperaba una casa llena, y Keaton no era el sótano más amplio del campus, la vigas forman un red a lo largo de los ladrillos envejecidos, solo había una señal de remodelaciones en este lugar.
-Esta es una de las peores ideas que Adam ha tenido hasta ahora- Nick murmuro.
-Es muy tarde para cambiarlo ahora- dije, mirando hacia las plataformas. El teléfono de Nick  sonó y él contesto. Su rostro se tiñe de azul contra la luz de la pantalla y finalmente podía ver las líneas de preocupación entre sus cejas que ya sabía dónde estaban. Hizo clic en unos botones y luego cerro el celular, agarrándome más fuerte.
-Pareces nervioso esta noche- susurre
-Me sentiré mejor cuando Frankie traiga su trasero punk aquí.
-Estoy aquí, niña quejumbrosa- Frankie dijo en voz baja. Apenas si podía ver su silueta en la oscuridad, pero su sonrisa brillaba con la luna llena -¿Cómo has estado hermana?- dijo él. Abrazándome con un brazo, y empujo juguetonamente a Nick con él otro.
-Estoy bien Frankie- Nick inmediatamente se relajo, y luego él me llevo a la parte de atrás del edifico de la mano.
-Si los policías aparecen y nos separamos, veámonos en la residencia Morgan ¿de acuerdo?- Nick le dijo a su hermano. Nos detuvimos en una ventana abierta al nivel del suelo, la señal de que Adam estaba adentro y esperando.
-¿Estás jugando conmigo?- dijo Frankie, mirando a la ventana  -Miley apenas va acabar por allí.
-Pasará- Nick le aseguro, gateando en la oscuridad hacia el interior. Como muchas otras veces, me agache y me empuje hacia allí, sabiendo que Nick me atraparía. Esperamos un momento, Frankie se empujo de la cornisa y cayó al suelo, casi perdiendo el equilibrio mientras sus pies tocaban el concreto.
-Tienes suerte de que te ame Miley. Yo no haría esta mierda por nadie más- Frank se quejo sacudiéndose la camisa.
Nick salto, cerrando la ventana en un rápido movimiento -Por aquí- dijo él guiándonos por la oscuridad. Pasillo tras pasillo, tome la mano de Nick sintiendo a Frankie apretar la tela de mi camisa. Podía escuchar pequeños fragmentos de grava raspar el hormigón, y yo me arrastraba por el suelo. Abrí mucho mis ojos tratando de adaptarlos a la oscuridad del sótano, pero no había ninguna luz para ayudarlos.
Frankie suspiro después de la tercera vuelta -Nunca encontraremos una forma de salir de aquí.
-Solo sígueme al salir, estarás bien- dijo Nick irritado antes las quejas de Frankie, a medida de que el pasillo iba iluminándose yo sabía que estaba cerca cuando el rugido de la multitud llego con un tono febril de número y nombre, sabía que habíamos llegado. El salón donde Nick esperaba ser llamado, normalmente solo tenía una linterna y una silla, pero con las renovaciones, estaba lleno de sillas, escritorios y equipo al azar cubiertos con sabanas blancas.
Nick y Frankie discutieron estrategias para la pelea mientras yo me asome afuera. Era tan llena y caótica como en la última lucha, pero sin menos espacio. Muebles cubiertos con sabanas polvorientas alineadas al final de la pared, empujadas a un lado para hacer espacio a los espectadores. La habitación estaba más oscura de lo normal, supuse que Adam no quería llamar la atención sobre nuestro paradero. Linternas colgadas del techo, creando un resplandor oscuro, mientras las apuestas en efectivo aun se celebraban.
-¿Pigeon, me escuchaste?- Nick dijo, tocando mi brazo.
-¿Qué?- dije parpadeando.
-Quiero que te pares cerca de esta puerta, ¿de acuerdo? Mantente agarrada del brazo de Frank todo el tiempo.
-No me moveré, lo prometo- Nick sonrió, su hoyuelo perfecto hundiéndose.
-Ahora tú pareces nerviosa.
Di un vistazo de la puerta a él -No tengo un buen presentimiento sobre esto, Nick. No sobre las peleas pero…algo. Este lugar me asusta.
-No estaremos mucho tiempo- Nick me aseguro, la voz de Adam vino por un alta voz, y luego un par de manos cálidas y familiares a cada lado de mi rostro -Te amo- dijo él. Mientras me levantaba del suelo, apretándome hacia él mientras me besaba. Él me bajo al suelo y engancho mi brazo alrededor de Frankie -No quites tus ojos de ella- le dijo él a su hermano -Incluso por un segundo, este lugar se vuelve loco una vez la pelea comienza.
-…así que démosle la bienvenida al contrincante de hoy…JOHN SAVAGE.
-La guardare con mi vida, hermanito- dijo Frankie tirando de mi brazo -Ahora patéale el trasero a este tipo, y vámonos de aquí.
-Nick EL LOCO PERRO Jonas- Adam grito por el alta voz. El volumen era ensordecedor mientras él hacia su camino a través de la multitud. Mire a Frankie quien tenía la más pequeña sonrisa en su rostro. Cualquier otra persona no lo hubiese notado, pero yo podía ver el orgullo en sus ojos. Cuando Nick llego al centro del Círculo, trague. John no era mucho más grande, pero él se veía más diferente con la que cualquier otra había luchado, incluyendo al sujeto con el que lucho en las vegas. Él no estaba intentando intimidar con una mirada a Nick como los demás: él estaba estudiando, preparando la pelea en su mente. Tan analíticos como eran sus ojos, también estaban vacíos de razón, yo sabía que antes de que la pelea comenzara que Nick tendría que tener mucho cuidado, él estaba sentado frente a un demonio. Nick también parecía haberlo notado también. Su habitual sonrisa había sido remplazada, por una mirada intensa, cuando el cuerno sonó, John ataco.
-Jesús- dije tomando el brazo de Frankie. Frankie se movió como Nick lo hizo, como si fueran uno. Me tense con cada movimiento que John hacia, luchando con la urgencia de cerrar mis ojos. No había movimientos perdidos; John era astuto y preciso. Todas las otras peleas de Nick parecían descuidadas en comparación. La fuerza bruta detrás de los golpes era impresionante, como si toda la cosa fuera coreografiada y preparada a la perfección. El aire en la habitación era pesado y estancado. El polvo en las sabanas había sido alborotado y atrapado en mi garganta cada vez que me quedaba sin aliento. Cuanto más larga era la pelea peor era esa sensación, no podía quitármelo y aun así me forcé aquedarme en el lugar para que Nick pudiera concentrarse. Por un momento estuve hipnotizada por el espectáculo en el centro del sótano, lo siguiente es que me empujan desde atrás. Mi cabeza se echo hacia atrás por el golpe, pero apreté mi agarre, negándome a retirarme de mi puesto prometido. Frankie se dio vuelta y agarro la camiseta de los dos hombres detrás nuestros y los tiro al suelo como muñecas.
-¡Aléjense o los matare!- gritó a los hombres que nos miraban en el piso. Agarre su brazo con fuerza y le dio unas palmadas -Te tengo, Miley solo mira la pelea- Nick lo estaba haciendo bien, y suspire cuando lanzo el primer golpe. La multitud se hacía más ruidosa, pero la advertencia de Frankie dejo a esos detrás nuestro a una distancia segura. Nick lanzo un golpe seguro y luego me miro, rápidamente retomando su atención a John. Sus movimientos eran agiles, casi calculadores. Parecía predecir los ataques de John antes de que él los hiciera. Notablemente impaciente, John envolvió sus brazos alrededor de Nick, jalándolo al piso. Como unidos, la multitud que rodea el anillo improvisado se aprietan contra este, acercándose cuando la acción es en el suelo.
-¡No puedo verlo Frank!- grite mientras me paraba en las puntas de los pies.
Frankie miro alrededor, encontrando la silla de madera de Adam, en un movimiento como de baile. Él me paso de un brazo a otro, ayudándome a subir por encima de la multitud -¿Puedes verlo?
-Si- dije sosteniéndome de los brazos de Frankie para equilibrio -Él está encima pero las piernas de John están en su cuello.
Frankie se acercó sobre los dedos de sus pies y puso su mano libre alrededor de su boca -¡GOLPEA SU TRASERO NICK!- Mire hacia abajo de Frankie y se acercó para echarle una mejor mirada al hombre en el suelo. De repente Nick estaba en el suelo, John sosteniéndose fuertemente del cuello de Nick con sus piernas. Nick cayó de rodillas golpeando la espalda y cabeza de John contra el concreto en un devastador golpe. Las piernas de John quedaron inertes liberando el cuello de Nick. Y Nick llevo hacia atrás su codo. Golpeándolo una y otra vez con su puño cerrado hasta que Adam lo detuvo. Lanzando el cuadrado rojo al cuerpo flácido de John. La sala estallo, animando cuando Adam levanto la mano de Nick al aire. Frankie abrazo mis piernas. Gritando la victoria de su hermano. Nick me miro con una sonrisa amplia y sangrienta; su ojo derecho comenzaba a inflamarse. A medida que el dinero pasaba por las manos de la gente, la multitud comenzaba a serpentear, preparada para irse. Mis ojos se dirigieron a una linterna que parpadeaba salvajemente balanceándose de un lado a otro detrás de Nick. Liquido cayendo de la base, mojando la sabana de abajo, mi estomago se hundió.
-¿Frankie?- Atrayendo su atención, señale la esquina. En ese momento, la linterna se cayó de su puesto, cayendo en la sabana de abajo, inmediatamente estallando en llamas.
-¡Santa mierda!- Frankie dijo, agarrando mis piernas. Unos cuantos hombre al lado del fuego, saltaron. Viendo asombrados como el fuego saltaba a la otra sabana. Humo negro salía desde la esquina, y al tiempo cada persona en la sala entro en pánico, empujando su camino para encontrar la salida. Mis ojos se encontraron con los de Nick,  y una mirada de terror distorsiono su rostro.
-¡Miley!- Él grito empujando el mar de gente entre nosotros.
-¡Vamos!- Frankie grito. Bajándome de la silla a su lado. La habitación se oscureció, y un ruido fuerte sonó desde el otro lado de la habitación, las otras linternas hacían combustión y se agregaban al fuego en pequeñas explosiones. Frankie tomo mi brazo, poniéndome tras de él forzando su camino a través de la multitud.
-¡No podemos ir por ahí! ¡Tenemos que devolvernos por el camino por el que llegamos!- grite, resistiéndome. Frank miro alrededor formando un plan para escapar en medio de la confusión. Mire de nuevo a Nick, mirándolo como intentaba hacerse camino a través de la habitación, mientras la multitud aumentaba, Nick fue alejado cada vez mas. Los emocionantes aplausos ahora eran gritos horrorizados de miedo y desesperación mientras todos luchaban por encontrar la salida. Frankie me jalo a la salida y me jalo a la salida.
-¡Nick!- Grite, intentando alcanzarlo. Él estaba tosiendo, alejando el humo.
-Por este lado Nick- Frankie le grito.
-Solo sácala de aquí, Frank, saca a Pigeon- dijo él tosiendo.
Confitado, Frankie me miro a mí. Podía ver el miedo en sus ojos -No se la forma de salir.
Mire a Nick una vez más, su silueta parpadeaba por las llamas que se habían extendido entre nosotros -¡Nick!
-¡Solo vete!, ¡Los alcanzare más adelante!- Su voz era ahoga por el caos alrededor nuestro, y tome la manga de Frankie
-Por este camino Frank- dije, sintiendo las lágrimas y el humo quemando en mis ojos. Docenas de gente llena de pánico estaba entre Nick y su única salida. Tire de la mano de Frankie, empujando a cualquiera de mi camino. Alcanzamos la entrada y mire de atrás hacia adelante. Dos pasillos oscuros, con poca luz por el fuego detrás de nosotros.
-¡Por este camino!- dije, jalando su mano de nuevo.
-¿Estás segura?- Frankie pregunto, su voz gruesa con duda y miedo.
-¡Vamos!- dije, jalándolo de nuevo. Cuanto más lejos nos encontrábamos más oscuras las habitaciones se volvían. Después de unos instantes, mis respiraciones eran más fáciles a medida de que dejábamos el humo atrás. Pero los gritos no disminuyeron, cada vez eran más fuertes y frenéticos que antes. Los horríficos sonidos de atrás alimentaron mi determinación, manteniendo mis pasos rápido y con propósito. Para la segunda vuelta, estábamos caminando a ciegas a través de la oscuridad. Mantuve mi mano frente a mí, sintiendo la pared con mi mano libre y tomando la mano de Frankie con la otra.
-Crees que salió?- Frankie pregunto.
Su pregunta debilitaba mi concentración, y trate de empujar la respuesta de mi mente -Sigue moviéndote- dije ahogándome.

2 comentarios:

  1. QUE?!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    NO NO NO NO NO PODES DEJARLA AHI POR QUE ME QUERES DEJARME CON LA ANGUSTIA DE QUE LE PASO A NICK POR FA SIGUELA ESPERO QUE NICK ESTE BIEN
    SIGUELA!!!!!
    BESOS

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  2. MARGARITAAA TE ODIO -.- sube porfis

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